
Desde 2016, eso sí, se ha visto un estancamiento. De acuerdo al Global Entrepreneurship Monitor Chile (GEM), la intervención del género femenino en emprendimientos en etapas iniciales alcanzó un 20% en 2017, con mayor fuerza en las regiones de Aysén, Tarapacá y Atacama.
En la última década se ha concretado un aumento de las mujeres que buscan consolidar sus ideas en proyectos y empresas formales que representen un beneficio, tanto para ellas como para su entorno.
Esto lo refleja un informe entregado por el Global Entrepreneurship Monitor Chile (GEM) en el que se observa que desde el 2008 la evolución en emprendimiento en etapas iniciales (TEA) ha crecido sostenidamente hasta el 2016, lapso en el que pasó desde un 10% hasta un 20%, respectivamente.